La batería de mi smartphone no dura nada

Una de las afirmaciones más recurrentes en Internet y un problema que muchos tratan de comprender porque se produce. La incidencia no suele ser la baja capacidad de las baterías, sino el uso indebido de las funciones.

Nos puede sonar un poco extraño pero al final siempre suele ser ese el problema, salvo que la batería esté defectuosa. Aunque no nos demos cuenta, seguro que nuestro terminal está usando algunas funciones que no necesitamos, y eso como todo consume energía.

Está claro que con unas baterías de mucha mayor capacidad no tendríamos tantos problema con el dichoso cartel de batería baja, pero también hay que tener presente que el peso del dispositivo también aumentaría considerablemente, por tanto lo mejor será racionalizar el consumo de la misma, y de este modo lograremos incrementar mucho los tiempos entre recargas.

Por tanto en primer lugar hay que tener presente que cada función que tengamos activada en nuestro terminal producirá un consumo de energía, por tanto lo mejor es si no lo usas, desactívala.

Lo que más suele consumir y agotar nuestras baterías son las comunicaciones móviles, por tanto si no estamos usando el wifi o el bluetooth ya estamos tardando en apagarlos. Aunque parezca mentira el consumo de una de estas dos conexiones puede reducir en un 80% la autonomía de nuestro terminal, pasando de poderlo recargar una vez a la semana a tener que hacerlo a diario, o incluso en más de una ocasión, por tanto las conexiones inalámbricas solamente deben estar encendidas cuando sean usadas, y desactivadas en el instante en que no sean necesarias.

Otro factor importante en el consumo de nuestra batería es el brillo de la pantalla, ajustar un poco reduciendo el mismo también puede mejorar considerablemente la autonomía de la batería, y seguro que apenas lo notamos en la mayoría de las tareas que realizamos durante el uso del terminal.

Usa el modo avión cuando no quieras ser molestado. En muchas ocasiones dejamos el terminal y nos olvidamos del mismo durante horas, principalmente porque no queremos ser molestados durante una reunión o si tenemos el placer de dormir una siesta. Si todo ese tiempo tenemos el dispositivo en modo avión, ahorraremos considerablemente el gasto energético y por tanto nuestra batería nos permitirá seguir disfrutando sin tener que conectarlo para su recarga.

Si no usas el GPS ya estás perdiendo tiempo teniéndolo activo. Una prestación muy necesaria en nuestros días pero que no requiere estar conectada todo el tiempo. Activa la opción GPS cuando necesites usarla, pero recuerda desactivarla de inmediato cuando ya no la necesites pues el consumo de batería de este dispositivo es elevado, y puede terminar dejándote completamente vacías tus reservas, teniendo que cargarlo nuevamente.

Y no menos importante es el uso racional de las aplicaciones, las cuales pueden chupar literalmente la batería de nuestro terminal. Por tanto es muy aconsejable consultar en ajustes que aplicaciones consumen más memoria y recursos de nuestro terminal, y si fuera el caso llegar a cerrarlas totalmente para reducir el consumo de energía.

Si te acabas de comprar un nuevo terminal y la batería no te dura nada, seguro que revisando todos estos aspectos lograrás ampliar su autonomía mucho, y olvídate de quedarte colgado a media tarde.

Y si tienes un viejo terminal al que no encuentras una batería para cambiar, seguro que también puedes reutilizar tu viejo smartphone y comprarte otro, seguro que las compañías de smartphone te lo agradecen. 😉